Mi mesa de Nochebuena

 

En esta última época de nuestra vida, estamos lejos de nuestra casa, de nuestra familia y amigos; mis hijas mayores estudian fuera y vendrán para pasar la Navidad.

  En una noche tan especial, sólo estaremos los cinco, por eso quería que mis hijas disfrutaran de una cena fantástica y un ambiente acogedor como los que yo disfruté en mi infancia, cuando vivimos también tan lejos del resto de nuestra familia.

   Mi madre nos preparaba mesas maravillosas que hacían que todo fuera aún más mágico.

   Para esta ocasión, he vestido la mesa con un precioso mantel de hilo, bien planchado y en vez del clásico muletón, coloqué debajo un mantel gris liso para que se viera mejor la parte calada. 

Las servilletas dobladas como le gustaban a mi abuela.

   Como siempre un centro de flores que hice con una bandeja rectangular y unos vasos normales que adorné con unos lazos dorados.

   Sobre las servilletas y en la bandeja del centro coloqué unos adornos de árbol en forma de estrella de Fir&p; en los platos de pan unos pañitos de encaje de bolillos que compré en Almagro; y como vasos de agua he utilizado unos vasos de té que me parecían muy grandes para ese fin.

   Así quedó:

   Más detalles:

   Los angelitos son la aportación de la pequeña de la casa y me pareció que quedaban muy bien.

   Un poco de cariño en cada celebración hace que sea inolvidable.

Espero que os haya gustado.

¡Feliz Navidad!